“El
tango desde los orígenes a la actualidad”
por
Paula Sobrado
Con
la sanción de la Constitución Nacional en el año 1853 comienza el
proceso de conformación del Estado moderno en Argentina que en los
años '80 se veía consolidado a partir de tres ejes:
- asegurar la instauración del “orden conservador” para garantizar el control de la sucesión presidencial a través de métodos como: el sufragio censitario (tienen derecho a voto los hombres con cierto nivel de renta), fraude electoral (década infame 1930-1943), consolidación de los conservadores en el poder hasta 1916 (año de asunción del radical Hipólito Yrigoyen, elegido por sufragio universal). Ante la necesidad de la oligarquía terrateniente de apropiarse de más tierras, era necesario ampliar los límites del territorio argentino hacia el sur y hacia el norte. Para dicho fin se formó un ejército de peones del campo (gauchos) para luchar contra los aborígenes de los territorios del Gran Chaco y la Patagonia. Esta operación de aniquilación sistemática de los aborígenes se denominó “Campaña del Desierto”. Una vez alcanzados los objetivos de la misma, el ejército se disgregó y los gauchos se establecieron en las ciudades ocupando un lugar marginal junto a los negros y los inmigrantes pobres.
- La consolidación del modelo agroexportador, Argentina como productor y exportador de materias primas e importador de materias manufacturadas.
- El fuerte aluvión de inmigración frustró los planes de la generación del '80 cuyo modelo socio-económico era EEUU e Inglaterra. La distribución de los inmigrantes fue mayormente en las ciudades.
Las
fiestas de carnaval son los momentos en que los negros pueden hacer
públicos sus ritos, los gauchos sus danzas y payadas y los
inmigrantes europeos sus bailes y cánticos. Con el aporte de todos
estos elementos surge el tango como práctica marginal y antagónica
al modelo dominante en el Río de la Plata para constituirse en una
“manifestación sociocultural emergente” con nuevas prácticas,
nuevos valores y nuevas relaciones.
Las
raíces negras
Si
bien los bailes africanos estaban prohibidos en épocas de
virreinato, estas danzas persistieron en forma de candombe (como
evocación de sus tradiciones culturales) Estas prácticas se
realizan en lugares de reunión llamados “tango”, “samba”,
“semba”, “candombe”
Los
payadores
Los
gauchos realizan las payadas que son contiendas verbales con guitarra
basadas en improvisaciones poéticas cuyo tema gira en torno al
contexto sociopolítico. Cuando uno de los participantes no puede
contestar termina la payada. Los payadores hacia 1880 se
profesionalizan y pasan a integrar los pequeños teatros, cafés y
confiterías y es allí donde incorporan el ritmo milonguero a su
canto. La milonga a su vez obtiene su letra de las payadas.
Los
inmigrantes
El
proyecto civilizatorio impulsado principalmente por Sarmiento buscaba
promover la inmigración europea. Como consecuencia, la confluencia
entre criollos e inmigrantes genera una estructura sociopolítica en
tensión caracterizada por la discriminación y la incomprensión.
En
este contexto, surgen las figuras del compadrito
y la percanta
como prototipos culturales. El compadrito es mezcla de mestizo,
mulato e inmigrante europeo de fines del s. XIX. Se burla de los
bailes de los negros pero a la vez él mismo es segregado por
“gringo” (que no cumple las expectativas de la élite que deseaba
una inmigración anglosajona) y por su componente gauchesco (abandono
del área rural para migrar a la ciudad para trabajar como peón en
mataderos, saladeros). El compadrito tiene su propio sistema de
normas en torno al juego, la prostitución, la noche. Junto a la
figura del compadrito surge la percanta. Ésta es la mujer que en la
marginalidad se prostituye voluntaria o involuntariamente bajo la
protección del compadrito que la explota sexual y económicamente.
Según Rosboch, la percanta implica no sólo la prostitución sino
las relaciones extramaritales.
Los
primeros lugares donde se danza la milonga son los mataderos que se
transforman en algo similar a una pulpería donde coexisten el tango,
la milonga, el alcohol, la riña de gallos. Estos son los “bailongos”
y al lado de estos se establecen las carpas donde se les paga a las
mujeres para tener derecho a bailar tres o cuatro tangos.
Los
inmigrantes que tenían posibilidades iban a vivir a los conventillos
que eran las casonas que habían pertenecido a la élite porteña
antes de la fiebre amarilla. En estas edificaciones el hacinamiento
es moneda corriente donde se entremezclan inmigrantes de distintas
nacionalidades, costumbres, idiomas. Todo confluye en el patio donde
se organizan milongas que favorecen la cohesión social. El tango una
vez que llega al conventillo empieza a ser aceptado en otros estratos
sociales y se despega del aspecto prostibulario. Cuando esto ocurre
hay una transformación de la danza con la censura de sus principales
figuras. Se dice que el tango se “adecenta” desde el punto de
vista coreográfico.
En
el año 1910 se produce el apogeo internacional del tango y esto
conlleva a las clases de élite a aceptarlo. Una vez que el tango
sale de los “piringundines” o las “carpas” pasa a los lugares
frecuentados por la clase media y alta. En dichos centros sociales el
tango sufre transformaciones coreográficas que lo hacen más
sencillo y “decente”.
Las
letras de los primeros tangos están relacionados con la situación
de marginalidad social de quienes hacen las letras. Los temas hacen
alusión, metafóricamente, a los órganos reproductores femeninos y
masculinos. Los primeros tangos compuestos alrededor de la década de
1880 tienen letras ligadas al arrabal. Tangos muy populares fueron:
“Dame la lata” en referencia a la ficha de lata que compraban los
hombres para bailar tango con una mujer o “La flauta de Bartolo”
en alusión a las dotes sexuales de los negros.
Una
vez que el tango es aceptado por la élite porteña aparecen músicos
empíricos de clase media que firman los tangos. Desde este momento
y hasta ca.1920 se denomina este período como Guardia
Vieja.
Tiene
características formales: no hay organización en los conjuntos
instrumentales, prevalece la improvisación y no hay solistas. Se
desarrolla en el ambiente prostibulario. Los tangos de la Guardia
Vieja tienen un espíritu alegre y vivaz similar a la milonga. Eran
tangos esencialmente para bailar en las fiestas populares, cafetines
y burdeles. Desde el punto de vista coreográfico el tango de la
Guardia Vieja tiene su origen en los piringundines y prostíbulos
inspirado en los bailes de moda del momento como: la polka, la
mazurka, la habanera, todos estos son bailes de pareja con cortes,
sentadas y quebradas. La diferencia es que en el tango el abrazo se
hace más cerrado y tiene una diversidad de figuras como: el paseo,
la rueda, la marcha, la parada, etc.
En
cuanto a los instrumentos para ejecutar tangos al principio se usan
los más usuales en ese momento como la flauta, el violín y la
guitarra y más tarde se incorporan el bandoneón y el piano. Con el
tiempo se conforma una nueva organización instrumental que consiste
en la guitarra como instrumento central, el violín y el bandoneón.
Esta organización culmina con la aparición de las orquestas
típicas.
En
cuanto a las letras de los tangos, según Stilman, pocos de ellos la
tuvieron. Aparecen los primeros versificadores del tango como por ej:
Angel Villoldo, Gobbi, Ricardo Podestá. Se usa el lunfardo que es la
jerga de los delincuentes mechado con el habla popular. Surge el
cantante de tangos aunque todavía no es una figura central. Su
origen se vincula con la figura del payador urbano quien entonaba sus
milongas en almacenes, circos, etc.
En
esta época aparecen los sellos discográficos dando comienzo a la
industria grabadora argentina. Se graban versiones fonográficas de
Angel Villoldo y también hay otros letristas que componen tangos
para propagandas.
A
partir de la consolidación de ciertos rasgos como la
profesionalización,
la mayor importancia de la letra
y
el cantor,
la standardización de la “orquesta
típica”,
la mayor difusión
en medios de comunicación, podemos hablar de una nueva etapa que se
denomina Guardia
Nueva.
Esta puede ubicarse aproximadamente del año 1920 hasta alrededor de
1960. Como características generales caben destacar: a) el papel del
cantor solista como ídolo popular con acompañamiento de guitarras,
b) la conformación de la orquesta típica con violines, bandoneones,
contrabajo y piano, c) la danza se modera y desaparecen las figuras
coreográficas, d) el tango sale del suburbio y lo adopta la alta
burguesía, e) pasa de los piringundines a los cines (número vivo),
teatros, clubes, casas de familia.
Aparecen
los derechos de autor sobre la producción de tango, se industrializa
su difusión a través de radio, revistas, televisión, grabaciones.
Las principales orquestas típicas fueron la de de Caro y la de
Cobián. Se desarrollan dos escuelas con estilos que difieren uno del
otro. Por un lado la escuela tradicional que le da más importancia a
la marcación rítmica, la sencillez armónica y hay un predominio
acentuado de la danza; por otro lado, la escuela evolucionista (de
Caro) que introduce cambios en el tango, es música para escuchar. De
Caro,por ejemplo, logra combinar la riqueza de la música académica
europea con el ritmo y el canyengue del tango.
En
la década del '40 el tango experimenta un resurgimiento para
alcanzar su mayor calidad tanto compositiva como interpretativa. Se
destacan las figuras de Salgán, Troilo, Pugliese y Gobbi.
Hacia
1945 aparece una escuela de vanguardia que introduce elementos de la
música clásica al tango lo cual genera que la danza quede relegada.
Dentro de esta vanguardia cabe mencionar a: Mariano Mores, Salgán,
Francini aunque el mayor exponente sin duda es Piazzola. La
renovación que produce Piazzola lleva a innovar tanto el aspecto
compositivo como el interpretativo produciéndose así una ruptura
con el tango tradicional.
Debido
al arribo de géneros musicales foráneos y el estilo del tango con
letras que aluden a un pasado desconocido por la juventud, se va
originando la decadencia del mismo que es reemplazado paulatinamente
por el rock nacional.
A
partir de la década del '80 Piazzola revitaliza el tango a través
de la composición de obras junto a Horacio Ferrer, poeta y
ensayista. Agregado a esto la vigencia del tango en Europa con el
espectáculo “Tango Argentino”, figuras relevantes como Susana
Rinaldi, Horacio Salgán, mantuvieron la vitalidad del género hasta
el presente.
BIBLIOGRAFÍA
Rosboch,
María Eugenia (2006). La
rebelión de los abrazos. Tango, milonga y danza.
La Plata, EDULP
Stilman,
Eduardo (1965). Historia
del tango.
Buenos Aires, Editorial Brújula
AA.
VV. 1999: “Argentina”, en Diccionario
de la Música Española e Hispanoamericana (Ed.
Emilio Casares Rodicio). Vol
I.
Madrid, Sociedad General de Autores y Editores
